Telecinco ha anunciado que retirará el polígrafo de su parrilla en horario infantil, y propone a las televisiones un pacto para conseguirlo. La medida en principio es de alabar, aunque no sólo se debería de quitar el polígrafo, sino todos los contenidos soeces que ocupan la parrilla de las televisiones españolas. Porque cuando T5 renuncia al polígrafo, no renuncia a la visita de las Nurias Bermúdez y personajes de medio pelo a sus platós. No elimina el Aquí Hay Tomate de sus sobremesas, con sus correctísimos vídeos y sus comentarios que dicen todo, pero sin decir nada, cubriéndose las espaldas de demandas.
Simplemente porque cuando la emisora de Fuencarral anuncia la eliminación del polígrafo no se preocupa por la salud mental de niños y adultos, simplemente responde a resultados de audiencia. Su programa A Tu Lado lleva meses perdiendo audiencia, y se ha convertido en la tercera opción de la tarde. El polígrafo fue la última carta que se jugo Telecinco para salvar su tarde, para levantar a este programa, y fracasó. Ahora, con esta iniciativa sólo espera conseguir algo de la buena imagen que nol le queda, y después debilitar a su rival Jaime Cantizano, que con su en Antena se ha hecho un hueco las tardes de la televisión española.
Pero es que Telecinco se equivoca de rival, el programa más visto de su franja horaria es España Directo, ese programa de bombo y pandereta que muestra las cocinas típicas de neustro país, un programa de guante blanco donde los españolitos de a pie son los protagonistas. Qué no nos intenten engañar con su falsa responsabilidad, cuando lo único que se esconde detrás es el deseo de la audiencia y d ela publicidad. Telecinco no entiende que lo que sobra en su programación no es su máquina de dudosa credibilidad, sino sobra los famosillos, los personajillos metidos a periodistas, los amantes, los primos hermanos del vecino de la Pantoja. Pero claro, ¿si le quitas eso a T5 Qué le queda?
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